Banyan Tree Bintan

Sehr hübsche Bungalows mit viel Privatsphäre und direkter Aussicht aufs Meer. Gut ausgestattet mit Nespresso-Maschine (Kapseln werden vom sehr freundlichen Houskeeping auf Nachfrage jederzeit nachgeliefert), Trinkwasser in Flaschen wird grosszügig nachgefüllt, Antimückenlotion, etc. gehört zur Ausstattung. Grosszügige, überdachte Terrasse mit Plansch-Pool und Vögeln oder Eichhörnchen im Dach. Zwei Pools vorhanden - ein Infinity direkt beim einen Restaurant, einer am Strand. Mehr als genügend Liegen; die meiste Zeit waren wir alleine. Am Wochenende tendenziell etwas mehr Leute, aber immer noch sehr entspannt. Ruhiges, sauberes, klares Meer, 29 Grad warm und flach abfallender, breiter, feiner Sandstrand. Essen: drei hübsche Restaurants (Thai, Indonesisch, Mediterran) gehören direkt zum Hotel - wir waren von allen begeistert. Sehr aufmerksamer Service, immer mit Gruss aus der Küche, grosse Portionen. Preislich nicht ganz günstig, aber gut zahlbar, wenn man sieht / schmeckt, was man dafür bekommt. Alkohol teuer, aber das ist dem Einfuhrzoll geschuldet. Happy Hour an der Beachbar nutzen. Über allem steht das unglaublich freundliche Personal - von der Reception, welche sich um sämtliche Anliegen kümmert, über die Buggy-Fahrer, die immer bereit sind, einen gut gelaunt mitzunehmen, die Pool-Menschen, welche sich umgehend um Wasser, Mückenlotion und frische Handtücher kümmern, der Service in den Restaurant und vor allem die Houskeeping-Crew. Diese nimmt sich allen Wünschen an, ist wahnsinnig warmherzig, bringt kleine Geschenke und bastelt zum Abschied ein mit Blütenblättern und Handtuchtieren dekoriertes Zimmer. Amazing!

Fantástico viaje en familia a Bintan. Encontramos en Bayantree un lugar acogedor con gente amable y cariñosa. Todo el equipo, desde Ades, recepción, conductores de Booguie, camareros se desvivieron por hacer de nuestra estancia una experiencia inolvidable. Y lo consiguieron. "Terima Kasih"

Desde Singapore llegamos a Bintan en ferry, muy buena y fácil conexión. El transfer del hotel ya nos estaba esperando al llegar y nos llevaron hasta el complejo. Era parte de nuestra luna de miel, un regalo de nuestra familia, y no sabíamos muy bien lo que nos íbamos a encontrar. La recepción del hotel es espectacular, y el trato del servicio muy agradable. Como llegamos pronto no estaba la habitación preparada, pero nos fuimos a la playa hasta que nos avisaron (no tardaron mucho, y en seguida nos localizaron para avisarnos que ya habían llevado el equipaje a la villa). Las villas son espectaculares, tienen piscina privada, por lo que si quieres puedes quedarte en la habitación disfrutando del entorno, la paz y el relax del lugar. Nuestra villa tenia visitar al mar, y ver el atardecer desde allí era precioso. Disponen de varios restaurantes, con comidas y precios de diferentes tipos, probamos todos y nos gustaron mucho. También hay un SPA, el masaje y el ritual merecen mucho la pena. Durante toda la estancia el servicio fue exquisito, para desplazarnos por la finca el hotel dispone de buggies, desde recepción se encargaban de que siempre que necesites desplazarte un buggy te recoja en la puerta y te lleve donde necesites en ese momento. Desconexión y relax asegurados. La zona de la piscina también está muy bien (sobretodo la que pertenece al Banyan Tree), después la playa y otros espacios de piscina se comparten con otros alojamientos de la misma compañía pero de menos rango (Cassia). Cuidaron al máximo todos los detalles, y todos los días nos prepararon alguna sorpresa por nuestra luna de miel, fue maravilloso, no dejaban de sorprendernos. Qué pena que nos pille tan lejos y no podamos volver más a menudo. Una estancia muy recomendable en un entorno paradisíaco.

Un resort muy bien equipado para el turista instalaciones compartidas para tres niveles Cassia apartamentos en regimen de propiedad compartida, Angsana de un nivel medio y Banyan tree Superior alto. Este ultimo increible el servicio y atencion cliente. En Cassia falta pulir servicio muy deficiente de wi fi. Comina restaurantes de la playa bueno y actividades variadas. Aconsejable precio de Cassia razonable. Banyan tree Alto pero el trato e instalaciones lo justifican.

Mi marido y yo nos alojamos en el Banyan Tree de Bintan durante 6 noches siguiendo una estancia de 4 noches en Singapore. La terminal de ferry enfrente muy fácil ( excepto que tuvimos que pagar un exceso de equipaje de 70$) de los que no estábamos advertidos, ¡ten cuidado! El tranfer al hotel llevó 12 minutos (el responsable conductor nos informó), un coche agradable, una cara simpática. Recepción: Llegamos con lluvia, pero estaban sonrientes. El personal del registro de entrada es eficiente. Nos alojamos en la habitación 201 -cerca de la recepción, el vestíbulo y del aparcamiento de buggys- ¡así que no habia problema para coger un buggy cuando necesitábamos! Habitación 201: aparte de que no había toallas de baño cuando llegamos y de que el lector de DVD no funcionaba, no tuvimos ningún problema. Trajeron tas toallas de baño inmediatamente, el señor de mantenimiento vino a la media hora y no pudo arreglar el DVD, así que lo reemplazó,¡sin problemas! Béllamente presentada, estampados divinos, una figura hecha con toallas y flores todas las mañanas, una limpieza muy rápida y eficiente, fruta fresca, un jacuzzi encantador, terraza y unas vistas fabulosas sobre la zona de bosque y del mar a lo lejos, ¡maravilloso! Los productos de baño encantadores, un agradable vestidor, aunque no suficiéntemente amplio para nuestra estancia de 6 noches - creo que sería adecuado para un fin de semana largo-. Un paseo de bajada al restaurante Treetops y a la playa desde nuestra habitación -muy agradable por la mañana-. El desayuno estaba incluido en nuestra tarifa y merece la pena. Mi marido es vegetariano y el personal era más que amable de preparar los huevos como a él le gustaban. Champán incluido, salmón fresco, fresas y una buena mezcla de comida de estilo asiático y europea. Probamos todos los restaurantes y encontramos que el personal del "Cove" era especialmente simpático e interesado en hablar con nosotros y probando sus habilidades con el ingles. ¡Un gran saludo a Eva! Unas vistas maravillosas. En el Saffron merecía la pena vestirse bien y tomarse toda la noche para considerar cada menú y disfrutar de cada plato. ¡Realmente muy agradable! Entretenimiento: ¡Depende de ti! Una noche dieron una presentación acerca del medio ambiente y la conservación - ¡sólo asistimos 8! Maravillosamente expuesto, cócteles gratis y muy interesante - sólo durante una hora- ¡te recomiendo hacer el esfuerzo de ir! Insectos: Aunque uso religiosamente loción Autan que proporcionan gratis en la playa y en la habitación, me picaron mucho -unas 50 picaduras en 10 días-. ¡Mi marido raramente se preocupa del repelente y sólo le picron dos veces! Vida salvaje: Sin problemas, teníamos un pequeño lagarto Gecco, murciélagos comiendo fruta en la veranda al atardecer, ardillas, hormigas muy grandes y montones de pájaros. ¡Ninguno de estos visitantes nos preocupaba, todo forma parte de estar en un bosque húmedo! Piscina y playa: Pacífica, despejada, el personal nada intrusivo, pero atento. Mira las banderas de precaución con las medusas. Encantador paseo alrededor de la cala para ver a la gente local jugando al fútbol en la playa. Hacer esnórquel es divertido,¡hay mucho para ver! Spa: Caro, pero especial, ¡mímate! Excursiones: ¡El tiempo no es bueno, lluvia y tormentas cada día! Muy impredecible con el tiempo - ve sobre la marcha- Nos las arreglamos para hacer el tour de los manglares -estupendo cuando estas seco, pero ve a pillar un viaje en uno tradicional de pesca - la gente es tan agradable- ¡vive un poco y experimenta el Bintan real! Toda la experiencia nos hizo sentir mimados y con cariño por la gete indonesa.¡Disfruta! Podría seguir, pero te sugiero que contactes directamente conmigo si te puedo ayudar con alguna otra información.